Hola amig@s de vuelta a la rutina y el día a día no nos impide recordar
los momentos de estas vacaciones y yo os tenia que contar lo que descubrimos
este verano.
De nuestro viaje a Teruel nos trajimos un HUEVO DE DINOSAURIO,
como no podía ser de otra manera, claro.
Cuando Marc lo vio en el escaparate de la tienda de souvenirs,
fue derecho a su interior a pedírselo. Pero lo que no sabíamos
que era un experimento en el que a sumergirlo en el agua unos días,
ser abría y salía de su interior un DINOSAURIO, todo un entretenimiento y
diversión que nos tuvo en un "sin vivir", ;) el viaje y la vuelta en casa para sumergirlo
y ver cada día, día y más y más días poco se rompía y salía y crecía un dinosaurio.
Todos los día la rutina es ver el dinosaurio y por su puesto todas las visitas a casa
tienen que verlo con sus propio ojos...
¡Ya tenemos un nuevo amigo viviendo en casa!
Quería compartirlo con vosotros pues
fue toda una experiencia....
**feliz día**
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