Por fin los más pequeños podrán hacer sus creaciones
sin preocuparnos de que sea toxica o se la coman.
Si es comestible mejor que mejor, ¿no?
La receta:
2 tazas harina de maíz refinada (maicena)
1 tazas de agua fría
2 tazas de agua caliente
colorantes alimentarios, al gusto de cada uno.
Lo mezclamos, incluso la podemos hacer con ellos
y nuestro peques e incluso bebes, lo pasarán genial,
les encanta ensuciarse las manos y pastar...
El color en el papel no quedará muy impregnado pero
será muy original, y ahora que tenemos tiempo para ellos
y les encanta ¡vamos a jugar con la pintura de dedos comestible!
Una buena idea que encontré en PEQUEOCIO.
¡FELIZ DÍA!
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